Repasamos algunos de los anuncios más legendarios de los coleccionables por entregas.
Acabando el verano, siguiendo una tradición ancestral, la publicidad nos invita a coleccionar de manera desenfrenada. Y aunque menos del 10% de quienes compran el primer número acaban la colección, eso no impide que los anuncios exploten nuestra debilidad natural por la acumulación de objetos, cachivaches y fetiches varios. Libros, cromos, fósiles, monedas… si algo puede coleccionarse, también puede venderse.
Por eso, en Destapadas hemos repasado algunos de los anuncios de coleccionables por fascículos más memorables. Un ranking con la mejor creatividad publicitaria para ser disfrutada cómodamente en solo diez entregas. ¡No la dejes escapar!
Y recuerda que también puedes consultar nuestro ranking con los mejores anuncios frikis.
RBA: Conocer la ciencia
Más que conocer, esta colección de RBA anima a convertirse en un divulgador científico al más puro estilo Eduardo Punset. Un taxista venido arriba contándote en el trayecto cómo el ser humano desciende de las bacterias podía resultar cargante, tanto como el camarero dando la chapa con el combustible solar mientras te sirve un café en barra. Empoderamiento científico sin complejos.
RBA: Gutiérrez que le veo
En la década de los 90, del aburrido monólogo de un profesor sobre unas rocas metamórficas denominadas cornubianitas salió una de las frases más recordadas de la historia de la publicidad española. Esa melodía monótona del “Gutiérrezqueleveo” supuso un magnífico engament que animaba a comprar una colección de minerales y piedras que presuntamente animaría hasta al mismísimo Gutiérrez…¡que le veo!
Planeta Agostini: Érase una vez el hombre
Excepto en Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda, esta serie de televisión animada francesa de 1978 se vendió en todo el mundo. La colección “Érase una vez el hombre” estiró tanto el éxito de la historia de la humanidad en libros y vídeos que Planeta Agostini continuó la saga en el espacio, las Américas o la ciencia, entrado ya el nuevo siglo. Dabadabá dabadabadaba daba daba daaaaaaaaaaaa….
Orbis-Fabbri: Monedas del Mundo
Conocido es que el dinero mueve el mundo, y eso mismo debieron pensar los de Orbis-Fabbri para darle bola a su colección por entregas de monedas. Con cara de libra esterlina, una joven reina Isabel II, saluda a viva voz y rodando de canto a otros mandatarios encajados en divisas de marcos o yenes. Cortesía algo friki de estrategia de ventas para una actividad que la moneda única no ha dejado caer en el olvido.
Planeta de Agostini: Sauna
Planeta de Agostini dio en 1996 con la receta mágica para perder los kilos sobrantes. La colección de fascículos “Memoria de la Historia” y una sauna very hot conseguían por fascículos lo que milagrosas dietas prometían sin resultados. Ni Dukan, ni Keto, ni ayuno intermitente…un baño de vapor finlandés con los 30 libros más apasionantes de la historia harán el resto. ¡No te olvides la toalla!
RBA: La caza
Cuando se tienen ideas alocadas, absurdas o poco realistas se suele decir que tenemos pajaritos en la cabeza. De este insight parece que tiraron para la creatividad de este anuncio de la colección por fascículos de RBA dedicada a la cacería, un spot que no deja indiferente por su alto nivel de surrealismo y elevados toques gores del desenlace. ¡Gran martillazo!
Ediciones del Prado: Náufrago
La guasa es el hilo conductor de este anuncio de Ediciones del Prado para el lanzamiento de su colección ‘El mundo de los barcos’. Jugando con el mayor deseo de un náufrago de ser rescatado de una isla desierta, el vacile total es que te arrojen con sorna la primera entrega para construir tu embarcación por quincenas y no haya rescate alguno. ¡Ahí te quedas Robinson!
Curso IBM Programar es Fácil
Las escenas de acción y tensión de la saga Misión Imposible se han recreado hasta la saciedad en la publicidad, aunque la multinacional IBM prendió la mecha con este anuncio de coleccionables de una informática -sin límites- con la que aprender a programar tu futuro. Hay misiones que necesitan ¡¿un profesional?!
Colección Panini Mundial España 82
Cuarenta años han pasado de este gol por la escuadra que se marcó Panini en el Mundial del Fútbol del 82 con el anuncio de un álbum de cromos en el que los jugadores cobraban vida recién pegados ¡también en chicles!. La mascota Naranjito recibió críticas hasta de El Fary -quién quería algo “con más sangre española”- pero supo conquistarnos y hoy es un icono ochentero. ¡Golazo vitaminado!
